Corrieron durante horas hasta llegar de nuevo al poblado y gritando , reunieron a sus mayores en torno al centro de las cabañas : -¡agua !, ¡agua!
-¡hemos encontrado agua 💧!
Todos empezaron a saltar de contentos y acompañaron a los niños al lugar donde habían encontrado esa mina o manantial de agua fresca y cristalina.
Cuando lo vieron con sus propios ojos, gritaron de nuevo de alegría y bailaron toda la noche al son de los tambores , las antaras y zámpoñas, alrededor de una fogata .
Por la mañana decidieron todos hacer una enorme iguana 🦎 con piedras coloreadas , para agradecerle su contribución al pueblo y a su supervivencia.
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